• Creemos que todos los seres humanos tienen la misma dignidad y el derecho a ser tratados con el mismo respeto, independientemente de su discapacidad, edad, salud y otras circunstancias. Todos somos diferentes, pero todos tenemos derecho a ser tratados con respeto.

• Creemos que la diversidad natural de los seres humanos debe ser bienvenida y valorada. Todos somos diferentes, y nuestras diferencias y necesidades contribuyen a hacer del mundo un lugar en el que valga la pena vivir.

• Creemos que las personas realmente prosperan no como individuos solitarios sino cuando son parte de nuestras comunidades.

• Creemos que estas comunidades sólo prosperan cuando acogen a todos sus miembros y apoyan la participación activa de todos, cualesquiera que sean sus circunstancias personales.

• Todos necesitamos ayuda adicional de vez en cuando, y algunos de nosotros la necesitamos con regularidad y a lo largo de nuestra vida. Esto puede deberse a una discapacidad, a la vejez, a problemas de salud o a otras circunstancias. El hecho de que exista esta necesidad de apoyo adicional es natural y constituye una oportunidad importante para que todos reconozcamos nuestra necesidad de apoyo y nuestra interdependencia mutua.

No es necesario que las personas que necesitan apoyo adicional queden excluidas de la participación plena y activa en la vida comunitaria y es un error que tantos sistemas actuales excluyan a personas.